
El año pasado os informamos de un importante hallazgo relacionado con la música tradicional: un conjunto de cintas de cassette que contenían las grabaciones de campo realizadas por el investigador Juan José de Mur entre 1979 y 1985, que utilizaría pa...
La torre es de sillarejo y mampostería. Tiene un solo cuerpo y varios pisos al interior con forjado de madera sobre ménsulas.
El acceso se realiza desde el interior, por escalera situada en la cabecera norte que conduce a una estancia sobre la capilla principal, desde la cual se pasa a uno de los pisos de la torre, donde, a su vez, se encuentra la entrada a la abadía.
Se cubre con techumbre de madera y tejado de losa hacia las vertientes este y oeste, mientras que los lienzos norte y sur se prolongan en dos hastiales escalonados, con espadaña de medio punto en el sur. El campanario se abre con dos esbeltos vanos cerrados por arcos de medio punto en el lado sur, y con otros dos, más bajos al oeste. Dos pisos por debajo hay otros vanos en medio punto cegados en el costado sur.
El muro este presenta en todos los pisos un par de aperturas aspilleradas. Pero lo más llamativo es la presencia de matacanes sobre dos ménsulas escalonadas; hay uno en el costado oeste, junto a la esquina meridional, y dos en el este. Encontramos un cuarto en uno de los últimos pisos de la abadía.
Recientemente ha finalizado un laborioso e importantísimo proyecto histórico y archivístico: la sistematización, transcripción y publicación de las actas de las Cortes del Reino de Aragón entre 1164 y 1514, es decir, entre los reinados de Alfonso II y Fernando II, que constituyen una fuente esencial para conocer nuestro pasado. Los monumentales resultados de este trabajo, fruto del esfuerzo de más de una veintena de investigadores vinculados a la Universidad de Zaragoza durante 20 años, suman más de 11.000 páginas transcritas, que pueden ya consultarse en el portal DARA.
Jesús Vázquez ObradorSabiñánigo, Comarca del Alto Gállego, 2002